Cuando fui invitado (o creado) por Hateful a este lugar a desperdigar letras por doquier, nunca esperé que algo querría esperar; nunca quise tener algo que querer. Pero no, algo salió mal:
No tengo claro que no fue lo que si pasó; menos lo que si jamás ocurrió. El caso es que el nuevo año sigue y sigue y yo, bueno yo... persisto de cuando en vez aquí, de mal en cuanto allá: porque será que simplemente me dedico a no dedicarme a tener dedicación alguna. Quizás, si lo hiciere podría encontrar trabajo; Quizás, así también, podría ser encontrado por alguien más que los venditos cobradores de deudas que -de tanto en tanto- me siguen queriendo que yo quiera darles lo que no les quiero, o puedo entregar.
Mientras tanto, trataré de no pensar en lo que si puedo cuestionar, para al fin poder quizás algún día trabajar y si la suerte me acompaña, poder hacer algo terminado en "AR".